Juegos tradicionales para compartir con los niños
Durante las vacaciones de verano las necesidades de entretenimiento de niños y niñas son enormes. Para cubrir esas horas libres que dejan las clases, podemos practicar alguna actividad en familia al aire libre. Así, nos estaremos acercando a la naturaleza y transmitiremos a los más pequeños su valor. También estaremos haciendo ejercicio, algo fundamental para una vida saludable. Además de rutas por el campo y deportes, podemos introducirles en los juegos de toda la vida: son ideales para conectar las distintas generaciones y fortalecer los vínculos afectivos entre los miembros de la familia.
Los dispositivos electrónicos pueden convertir el tiempo de ocio de niños y jóvenes en demasiado estático. Para compensar, podemos proponer actividades que trabajen su psicomotricidad. Es el caso de la mayoría de juegos tradicionales; además de enriquecer su entretenimiento con ellos, aprenderán cosas nuevas de la cultura popular más cercana.
Estos juegos tienen mucho valor, puesto que nos cuentan parte de la historia de los pueblos. Al conocerlos y practicarlos estaremos fomentando su transmisión de una generación a otra, algo imprescindible para evitar que caigan en el olvido.
Hay mucha variedad entre los juegos tradicionales. Los hay más físicos, con el fondo, la coordinación, el equilibrio, el sentido del ritmo o la lateralidad como claves. Pero también hay juegos de palabras o de dibujos. Con unos y con otros, niños y niñas aprenden a socializar, a compartir, a trabajar en equipo y el compañerismo… además, mejoran su vocabulario y crece su imaginación.
Juegos populares para divertirse en familia y conservar las tradiciones
Encontraremos variantes locales y muchas propuestas propias de cada zona, pero estos son algunos de los juegos populares más conocidos:
- La rayuela: el equilibrio y la habilidad son fundamentales en este clásico.
- La gallinita ciega: permite trabajar el equilibrio y la coordinación y resulta muy divertido para compartir tiempo pequeños y mayores.
- El escondite: perfecto para días al aire libre, quien se esconda con más ingenio tendrá más posibilidades de ganar.
- El pañuelo: la rapidez y la agilidad son las claves de este divertido juego.
- Carrera de sacos: también para toda la familia, será más entretenido cuanta más gente participe.
- El escondite inglés: ideal para espacios abiertos, ayuda a mejorar los reflejos y anima a competir de forma sana.
La comba, el veo veo, el diábolo, el tres en raya, el burro, las chapas, la peonza, las canicas, el juego de las sillas, el rescate, el balón prisionero… Los abuelos nos podrán explicar las reglas de muchos juegos tradicionales, pero papás y mamás también pueden compartir los de su infancia. Así no se perderán y estaremos creando momentos especiales y divertidos en familia.