La importancia de aprender a aprender desde edades tempranas
En varias ocasiones hemos hablado ya de la gran importancia que tiene enseñar a los alumnos a aprender a pensar. Que los niños desarrollen un pensamiento crítico y creativo es esencial para que puedan tomar las mejores decisiones a lo largo de sus vidas. Pero no solo eso es importante, aprender a aprender también es primordial.
Cuanto antes empiecen a aprender a aprender, antes desarrollarán capacidades como la concentración, la autonomía, la autoestima y la motivación por el aprendizaje. Pero, para hablar de esto, antes debemos comprender el concepto de metacognición.
¿Qué es la metacognición?
Entendemos metacognición como el conocimiento que tenemos de nosotros mismos como aprendices, de nuestros puntos fuertes y nuestros puntos débiles, de nuestras características personales que puedan afectar a nuestro rendimiento… Pero también debemos tener en cuenta el conocimiento de la tarea, es decir, su mayor o menor dificultad, que nos ayudará a definir, como aprendices, la mejor estrategia para llevarla a cabo.
Flavell, uno de los pioneros en la utilización de este término, advierte que practicamos la metacognición cuando tenemos conciencia de la mayor dificultad para aprender un tema que otro, cuando comprendemos que tenemos que verificar un fenómeno antes de aceptarlo como un hecho, cuando pensamos que es necesario examinar todas y cada una de las alternativas en una elección múltiple antes de decidir cuál es la mejor, etc.
Las personas utilizamos de forma constante la metacognición, aunque lo hacemos de forma inconsciente. Autodirigir nuestro aprendizaje (y transferirlo a otros ámbitos de la vida) es una cuestión de máxima importancia para desenvolvernos con éxito en la vida.
Aprender a aprender desde pequeños
En la etapa de Educación Infantil, los niños empiezan a mostrar respuestas concretas que, en ojos de los investigadores, corresponden a la activación de su capacidad para realizar la metacognición. Los expertos señalan que esta es una capacidad que se encuentra latente en el ser humano desde su nacimiento, pero que solo logra ‘activarse’ cuando la etapa madurativa del niño alcanza las condiciones apropiadas, amén de una correcta estimulación de sus habilidades cognitivas*.
Es importante desarrollar estas habilidades metacognitivas cuanto antes; por eso, en el Colegio CEU San Pablo Montepríncipe ayudamos a nuestros alumnos a convertirse en aprendices autónomos y a que logren un aprendizaje que trascienda el ámbito escolar para proyectarse en su propia vida.
En el CEU conocemos los extraordinarios resultados que ofrece desarrollar la metacognición a edades tempranas. Por ello, a través de nuestro programa «Líderes con corazón» trabajamos la autonomía y el desarrollo competencial de nuestros alumnos desde los primeros años.
*»Metacognition: a way towards learning how to learn» (Sonia Osses y Sandra Jaramillo)