Con el objetivo de que sean capaces de tomar decisiones de forma autónoma, que asuman riesgos y consecuencias, que ganen en autoconfianza y superación, en los Colegios CEU trabajamos a diario para fomentar el espíritu emprendedor y para apoyar las iniciativas que proponga nuestro alumnado.
Todo esto les será muy útil tanto para su vida profesional como personal, pues las distintas normas que nos rigen -tanto europeas como estatales y autonómicas-, señalan que el espíritu emprendedor es una competencia fundamental que debe incluirse en el currículum.
¿Cuáles son los beneficios de trabajar el emprendimiento en las aulas?
Esta actitud y aptitud desarrolla el pensamiento creativo, la capacidad de análisis, la toma de decisiones, la confianza, el optimismo, la asertividad, la resolución eficaz de conflictos, la gestión de la incertidumbre y la adaptación a los cambios. Es decir, permite crear y ejecutar proyectos afrontando dificultades y superándolas con creatividad a través de la puesta en práctica de ideas propias.
Estas cualidades se pueden trabajar y aprender, de ahí la importancia de incluir el emprendimiento en la formación de niños y jóvenes. Las más relevantes son:
Estimulamos desde los primeros años el espíritu emprendedor
Esta forma de presentarse al mundo y de gestionar los recursos propios debe plantearse desde la infancia. Forma parte de una educación integral que se promueve a través de estos puntos:
A modo de conclusión, vemos que potenciar el desarrollo de la inteligencia emocional, por tanto, es imprescindible para fomentar el espíritu emprendedor. A continuación, vemos algunos ejemplos de cómo se plasma este aprendizaje en actividades y proyectos prácticos: